Un debate muy batido
Apenas supieron los candidatos que habría un debate, hicieron todo para reunir datos, contratar a quien les haga un buen discurso, comprar vestimenta nueva, pero lo que nunca reunieron fue el sentir verdadero hartazgo por los partidos políticos y sus excesos en el poder.
Una verdadera pérdida de tiempo, se les fue la oportunidad de representar a quienes están decepcionados de los actos de corrupción, nepotismo y abuso de autoridad, aquellos a quienes se les debe varios sexenios de fallas, mismas que después se vuelven acusaciones arregladas, en donde nunca pasa nada.
De muy bajo perfil la mayoría de los participantes, mala dicción, peor lectura, se nota su total desconocimiento en temas primordiales, básicos, sus problemáticas solo son ocurrencias en vez de propuestas, hilos de ideas mal formadas y mal planteadas.
El nivel del debate se convirtió en un batidero, una romería de ofensas, de disparates, de ataques que rayan en el absurdo, incluso en el mal gusto, de ese calibre son los debates, no podrían tener otro grado, quienes hoy son candidatos son emergentes bateadores sin la mínima preparación política, son sólo un relleno para las boletas.
Esperemos entonces por lo menos, ayuntamientos llenos de incompetentes, de oportunistas, que no tienen mayor mérito, que el de pertenecer a los intereses de partidos voraces, que solo estuvieron llenando cuotas de poder.