Bye, bye, a estos partidos tras las elecciones
Al no sumar la suficiente cantidad de votos, en las recientes elecciones intermedias, desaparecerían (por ley) del escenario nacional los partidos Fuerza por México, Partido Encuentro Solidario y Redes Sociales Progresistas, y con ellos el presupuesto que les asignaba el gobierno para que funcionaran.
En el artículo 94 de la Ley Federal de Partidos Políticos, se señala que la pérdida del registro de un partido se da cuando no se consigue el porcentaje del 3% en “elecciones federales ordinarias para diputados, senadores o presidente de los Estados Unidos Mexicanos”.
De acuerdo con el Instituto Nacional Electoral, aunque estos partidos se extingan, la medida no tendrá efectos sobre los triunfos que sus candidatos hayan obtenido en las elecciones nacionales, según el principio de mayoría relativa, quienes pueden unirse a un grupo parlamentario o crear uno propio.
Si ello ocurriese, estos políticos recibirán recursos de acuerdo con el número de diputados que formen el grupo, pero no obtendrían presupuestos del órgano regulador, ya que no se consideraría un partido político. En caso de no unirse a una bancada, los legisladores serán considerados sin partido.
Crear un partido político es una manera de recibir ingresos para vivir, pero no todos los partidos sobreviven. Anteriormente, también fueron disueltos Nueva Alianza, Partido Humanista, Partido Socialdemócrata, México Posible, Partido Cardenista y Partido Revolucionario de los Trabajadores.