Arrecifes en Riviera Maya amenazados y en peligro
Cuando escuchamos que los arrecifes están en peligro de extinción, quizás muchos tengamos como imagen en nuestras mentes, la caricatura de “Salvemos a Nemo”, donde todo es armonía y felicidad.
Pero la realidad supera la ficción. Hoy los arrecifes sufren grave deterioro por la mano del hombre a través de la sobreexplotación turística, por accidentes náuticos, fenómenos hidrometeorológicos y la deforestación.
En el mundo submarino, de las aguas azul turquesa del mar Caribe, que bañan la costa de Quintana Roo, cruza gran parte del Sistema Arrecifal Mesoamericano. Sus más de mil kilómetros de extensión que van desde México hasta Honduras, lo convierte en la segunda barrera coralina más grande del mundo, sólo por detrás de la Gran Barrera de Coral de Australia.
Es un segmento más de los atractivos de nuestras bellezas naturales que se ofrecen al turismo. Las empresas turísticas relacionadas con este ecosistema, proporcionan empleo a un tercio de la población quintanarroense en edad de trabajar.
Son sitios de biodiversidad única, porque albergan más de 60 tipos de corales y más de 500 especies de peces consideradas en peligro de extinción. Es el lugar donde se encuentra la mayor concentración de tiburones ballena, los escualos más grandes del mundo y, es hábitat de anidación y alimentación para cuatro especies de tortugas marinas.
Quintana Roo debe cuidar sus arrecifes
En la Riviera Maya, los arrecifes más famosos por sus particularidades son: Tortugas, Barracuda, Sábalos, Mama Viña, Jardines, Cojinuda en Paamaul y Puerto Aventuras, en donde la aventura submarina es única.
Pero a pesar de su riqueza natural y servicios que brinda a las personas, enfrenta varias amenazas, como el desarrollo urbano y turístico, así como las actividades extractivas de petróleo, gas y minerales, que deterioran la calidad del agua, indica la Secretaría de Medio Ambiente y Recursos Naturales (Semarnat).
La mano del hombre, los tiene bajo amenaza con la sobrepesca, el cambio climático, la extracción ilegal de especies y la introducción de organismos invasores, como el pez león, entre otros factores, los tiene en peligro.
De acuerdo con científicos, el sistema Arrecifal Mesoamericano, también está en peligro por la deforestación en Centroamérica, advierte un estudio de la Universidad de Southampton del Reino Unido. El estudio explica que las actividades de la tierra no suelen relacionarse con los océanos, pero convertir bosques tropicales en terrenos agrícolas puede alterar todo un ecosistema.
Stacey Felgate, estudiante de doctorado de la Universidad de Southampton y autora principal de la investigación, explica que especialistas estudiaron el flujo de materiales en ríos de la selva centroamericana hasta su desembocadura en las costas de Belice. Y encontraron que más material colorido entra a los ríos, después de su paso por tierras agrícolas, en comparación con los sitios de bosques naturales. Conforme avanza por los cuerpos de agua, este material se acumula, situación que sugiere que no puede ser descompuesto por los microorganismos que normalmente lo hacen.
Una vez que dicho material llega a las costas, sus colores absorben luz solar en lugar de reflejarla, por lo que oscurece el mar. De esta forma, puede afectar a organismos acuáticos, como pastos marinos y corales que necesitan luz para crecer, apunta el estudio publicado en “JGR Biogeosciences”.
Hay que repensar el servicio económico que brinda y cómo lo usamos
Esta maravilla natural, no sólo es un ecosistema para las especies marinas, tiene una gran importancia para la generación de recursos económicos vía el turismo. Las estadísticas del movimiento turístico, señalan que el Arrecife Mesoamericano, recibe la visita de millones de turistas cada año, quienes buscan una oportunidad de bucear con animales como el tiburón ballena, tortugas marinas y manatíes, de acuerdo con el Fondo Mundial para la Naturaleza (WWF, por sus siglas en inglés).
Más de dos millones de personas dependen de los recursos que provee el Arrecife
Mesoamericano para su supervivencia, según WWF. El Sistema Arrecifal Mesoamericano aporta 6,200 millones de dólares a la industria del turismo, pesca comercial y desarrollo costero. De continuar su degradación están en riesgo más de 3,100 millones de dólares para 2030.
Por Pedro Juárez Mauss